Diferencia entre el estrés y la ansiedad
La ansiedad es un síntoma del estrés. Mucha de la confusión que existe entre ambos términos y lo que los hace similares es que muchas veces aparecen juntos. De hecho, una situación estresante provoca ansiedad como uno de sus síntomas, aunque también puede producir otros, por ejemplo, dolores de cabeza. Los signos y síntomas de la ansiedad más comunes incluyen los siguientes:
a) Sensación de nerviosismo, agitación o tensión b) Sensación de peligro inminente, pánico o catástrofe c) Aumento del ritmo cardíaco d) Respiración acelerada (hiperventilación) e) Sudoración f) Temblores g) Sensación de debilidad o cansancio h) Problemas para concentrarse o para pensar en otra cosa que no sea la preocupación actual i) Tener problemas para conciliar el sueño j) Padecer problemas gastrointestinales (GI) k) Tener dificultades para controlar las preocupaciones l) Tener la necesidad de evitar las situaciones que generan ansiedad
Hace dos años la Organización Mundial de la Salud publica un artículo en el que estima 300 millones de trastornos depresivos y unos 260 millones de trastornos de ansiedad en todo el mundo. Las cifras son casi pandémicas y esto lo puedo comprobar como psicólogo especialista en ansiedad en Valencia.
Formulario de contacto
Qué es la ansiedad
Mi intención en este post es dar visibilidad, explicar y conceptualizar la ansiedad. En primer lugar, considero importante hacer explícito que los trastornos de ansiedad no son el tema en cuestión al que pretendo referirme, sino la ansiedad en sí misma. El que se diagnostique un trastorno o no depende del número de criterios que cumple la persona en cuestión. De este modo, puedo cumplir 4 criterios diagnósticos de un trastorno de ansiedad, pero si para el diagnóstico del mismo se requieren un mínimo de 5 criterios entonces no padezco ese trastorno.
¿Suena un poco raro verdad? Entiendo que no se trata pues de una cuestión dicotómica, o tienes el trastorno o no lo tienes; sino que el tema tiene más profundidad. La ansiedad se mueve en continuo de polaridades, de forma que puedo tener más o menos rasgos de personalidad ansiosa. Estos rasgos pueden potenciarse y llegar al nivel patológico e invalidante o pueden ser mitigados y regulados por recursos y factores de protección.
La cuestión entonces no es si tengo un trastorno de ansiedad, sino cómo de presente está la ansiedad en mi vida y si tengo recursos y capacidades para gestionarla. 260 millones de trastornos en todo el mundo son 260 millones de personas con un diagnóstico realizado por un profesional atendiendo a los criterios diagnósticos de cada trastorno. Pero hay muchas otras personas que no cumplen todos los criterios necesarios para un trastorno en concreto y que sin embargo la ansiedad está muy presente en sus vidas, lo que les limita e incapacita a pesar de la falta de un trastorno diagnosticado.
¿Cómo funciona la ansiedad?
La ansiedad es una respuesta fisiológica del organismo ante un estímulo estresor, en la que intervienen diversos procesos y sistemas como el parasimpático, el endocrino, la cognición, los patrones de conducta automatizados y muchos más.
Para explicar el funcionamiento de la ansiedad me es realmente útil y necesaria la dicotomía Controlar-Soltar:
- El control es una sensación perceptiva que permite a la persona desenvolverse ante una situación teniendo una sensación de capacidad y de seguridad. El control es necesario para poder vivir y desarrollarse con normalidad, ya que no sería sostenible para el organismo tener una sensación de incapacidad, de miedo o de estar bajo amenaza constante.
- El soltar o la aceptación, es la capacidad de reconocer la realidad de una situación, reconociendo un proceso o condición sin intentar cambiarlo o protestar. Es decir, el soltar me permite aceptar o entender que hay muchísimas variables que escapan a mi control; de forma que puedo abrirme ante la situación en cuestión sin tener que cambiarla o hacer algo al respecto, ya que esto no está en mi mano.
Como puedes ver, ambos conceptos pueden parecen opuestos o polares. Sin embargo, no se trata de una cuestión dicotómica sino de una polaridad en un continuo.
Controlar Soltar
En función de cómo de desarrollada esté mi capacidad de soltar o aceptar, y de cómo de aprendida y de integrada esté mi capacidad de controlar, la ansiedad tendrá mayor o menor presencia en mi vida.
De esta forma, cuanto más cerca me posicione vitalmente de la polaridad “controlar” más presente estará la ansiedad en mi vida y mayor sufrimiento me generará.
El siguiente paso es saber gestionar la ansiedad, y sobre esto te cuenta más en la siguiente entrada sobre «como gestiono mi ansiedad«.
Como siempre digo, si tienes cualquier duda o comentario al respecto del contenido de este Post te invito a que contactes conmigo como psicólogo en Valencia. Espero que ahora entiendas un poco mejor cómo funciona la ansiedad y te animes a pedir ayuda para gestionarla si así lo necesitas.
